Chaquetín Elizalde

En los últimos días el Araño no ha parado de escuchar las únicas 20 rolas que tenía Valentín Elizalde. Y obviamente no es por gusto, sino que parece que en todas y cada una de las sucursales que visita, los chavos nada más tienen 3 pinches  discos (o a veces menos), y en esta tienda le tocó la mala suerte al Araño de que 2 de esos 3 pinches veintiúnicos discos fueran de Chaquetín Elizalde.

 

Neta, a ese cabrón lo que lo hizo famoso fue que lo mataran. De hecho, antes de eso, el Araño ni conocía al individuo ese. Lo había escuchado nombrar un par de veces, incluso recuerda que una amiga le canceló a la mera hora su asistencia a la reunión que el Araño había planeado para recordar épocas antiguas de cuando aún estaba en la pensión de estudiantes porque ella iba a ir a ver al Chaquetín a la feria de Pachus; pero fuera de eso, el Araño no conocía ni una sola de sus canciones.

Claro, el día que vio en las noticias que lo habían plomeado, lo primerito que pensó fue que muy seguramente se lo habían chingado por tener pedos con el narco.

El caso es que desde entonces la… ¿carrera?... del chango ese se proyectó. Es, a resumidas cuentas, algo así como una especie de Selena Lennon. Y no, no por las canciones, sino porque a los 3 algún cabrón les hizo el favor de matarlos para hacerlos famosos.

La diferencia gruesa (y castrosa) es que este vato no era compositor (no lo era… ¿verdad?) y ni siquiera era un buen intérprete… ¡el pobre wey canta(ba) como si estuviera tarado! Neta, el Araño escuchó una rola “live” (en algún palenque pitero) donde Chaquetín dice que va a tener que leer la canción porque no se la sabe y blablablá… puta… habla con un tono tan, pero taaaaaaaaaan tarado, que hace que hasta la voz del propio Goofy suene más inteligente.

 

Lo más chaqueto es que, aparentemente, (ojalá el Araño esté en un error y lo que vio anunciado en las bardas que están en el tramo de la México-Pachuca que llega hasta su pueblo sea una mera coincidencia) uno de sus hermanos ya se está aprovechando de la situación y ya se lanzó de cantante.

 

Lo bueno es que en Francia ya no escuchará esas madres... a menos de que quiera utilizar al Chaquetín como ejemplo para enseñarles a sus alumnitos la manera incorrecta de hablar en español... y también a los "nakos" de K-paz de la Sierra, que siempre dicen "Oi" en lugar de "Oye". Sí, señores... "oi" NO EXISTE.

 

En fin… el caso es que el Araño está tan harto que desearía que Chaquetín Elizalde reviviera para matarlo él mismo otra vez.

 

 

PS: Ñoñaída, acabas de ganarte tu perrrrrjume de  Francia... siempre y cuando me dejen treparlo al avión, porque con eso del terrorismo y que además es una sustancia inflamable (¿Inflamable significa flamable? ¡Qué país este!) se ponen roñosos los de seguridad; y mo, tampoco se puede mandar por correo, está en la lista de sustancias prohibidas.